Un padre crea un videojuego sobre su experiencia con el cáncer infantil (El Periódico.com). Con este titular me encontré el otro día y me llamó la atención. Se trata de la historia real de Ryan Green, creador del videojuego That Dragon, Cancer, y padre de un niño con cáncer terminal que pelea junto a su familia contra su octavo tumor en tan solo 3 años de vida, y al que le pronosticaron que no pasaría de los 2 años.
«Se trata de una aventura interactiva donde el jugador adopta el papel del padre, Ryan Green, conociendo de esta manera la experiencia de cuidar a un hijo con cáncer terminal en el hospital«. Pues lo siento mucho, pero no me interesa. ¿De verdad alguien quiere sentir cómo se vive teniendo un hijo con un cáncer terminal? ¿Conocer como es su sufrimiento y qué siente el padre? Es algo que no quiero experimentar nunca ni de forma virtual y, mucho menos, de forma real.
Me parece muy bien las familias que comparten su experiencia para ayudar a otros, para recaudar fondos, para denunciar o reivindicar algo, o simplemente como desahogo de la situación que están viviendo. Pero este caso no es un blog, un documental, película o libro, es un videojuego donde tú te conviertes en protagonista, en el padre, que vive ese momento. Jugar a un videojuego donde ves el sufrimiento del niño en una UCI pediátrica, no lo veo muy claro.
Sí me parecen muy bien las aplicaciones y juegos que ayudan a los niños -y a veces a los propios mayores- a comprender situaciones difíciles como enfermedades, la muerte… de una forma lúdica y educativa (como por ejemplo la app de la que ya hable: Sara pequeña hada que explica a los pequeños qué es el Alzheimer). Pero, en esta ocasión -y según he entendido yo si no me he equivocado- este videojuego, que verá la luz en 2014 para la consola Ouya, no consistirá en superar niveles y ganar, sino que será «vivir» lo sufrido por ese padre.
Alabo la fuerza de esos padres y que, aunque los médicos no les den esperanza, sigan luchando y teniendo fe. Igual he juzgado muy rápido el videojuego sin haberlo probado, pero, sintiéndolo mucho, no deseo ponerme en su piel.
Y vosotros, ¿qué opináis?¿Veis necesario un juego así?
Crisnasa Blog 
No es verlo necesario pero el juego es una forma de aprender…quizás no somos el público pero habrá otros que quizás les interese….no me atrevo a juzgar pues así como mi desmadre significó una libertad para mi maternidad quizás ese juego de rol significó una terapia invaluable para el padre no crees?
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No tengo duda de que al padre le hace mucho bien contar lo que le está pasando de esa manera, pero yo no quiero experimentarlo. Cuando ves una película o lees un libro de un hecho real de este tipo puedes emocionarte y empatizar con los protagonistas reales, pero en el caso de un videojuego tú eres el que «manejas» al protagonista y el que toma las decisiones y no me parece un tema para querer vivirlo. Pero, ya digo, igual luego veo el videojuego y no es lo que me imagino. Veremos. Saludos y gracias por pasarte.
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